A lo largo de la vida de una mujer, las diferentes etapas que afectan a su zona genital (embarazos, partos, menopausia, etc..) provocan alteraciones varias que repercuten en el grosor, elasticidad, lubricación y capacidad de tensión, entre otros aspectos. Además, partir de los 50 años y como consecuencia de la disminución de los niveles de estrógenos, muchas mujeres padecen problemas de lubricación genital.

Todos estos síntomas afectan a la calidad de las relaciones sexuales.

Actualmente la última tecnología en láser permite poner solución a la sequedad vaginal mediante la estimulación en la producción de colágeno en los tejidos vaginales.

Con ello se consigue recuperar el tono y la lubricación vaginal además de resolver otros problemas como falta de control /fuerza en la vagina, reducir el diámetro de la vagina, etc.. repercutiendo directamente en la mejora la calidad de las relaciones sexuales y evitando el picor propio de la sequedad vaginal de forma natural y definitiva.